Este texto de carácter informativo es de tipo histórico-político. Fue escrito por un clérigo francés llamado Bossuet (1627-1704) a finales de siglo XVII y a principios del siglo XVIII. Las ideas principales son que “Dios lo es todo” y basándose en eso dice que “el príncipe, no es considerado un hombre en particular, todo el estado está en él, y la voluntad del pueblo es la suya”.
En el antiguo régimen la política era la monarquía absoluta donde el rey gobernaba todo el estado. Había tres estamentos: clérigos, nobles y pueblo llano. Los clérigos y los nobles son estamentos privilegiados (no pagan impuestos, tenían derechos sobre los campesinos,…). En el trascurso del siglo XVII todo el sistema cambia pasando por el despotismo ilustrado donde el rey quiere que entren las ideas ilustradas, pero que el rey controle los cambios. Hasta llegar a las revoluciones burguesas donde los burgueses ven que la monarquía no va a cambiar a fondo el sistema político y se rebelan contra los privilegiados.
En esta época había diferentes pensamientos como el de Bossuet, que defendía a Luis XIV símbolo del absolutismo o, de Montesquieu, que estaba en contra y que decía que había tres poderes básicos, legislativos, judiciales y ejecutivos, y que había que evitar juntarlos en una misma persona o institución.